Vivimos en un mundo en el que la economía es cada vez más compleja. Por este motivo, es necesario gestionar el dinero con un enfoque integral. La educación financiera y la planificación personal son pilares fundamentales que no solo ayudan a las personas a mejorar su bienestar económico, sino que además se complementan con la asesoría financiera y la mediación de seguros.
Gestionar nuestro dinero de manera eficiente no se trata solamente de entender y aplicar conceptos básicos sobre ahorro o la inversión, sino también de desarrollar hábitos duraderos, que se conviertan prácticamente en un acto reflejo, y que permitan tomar decisiones con conocimiento y responsabilidad. La educación financiera es un proceso continuo, no algo puntual.
Gracias a la certificación de Educador y Planificador Financiero Personal, desarrollada con base en las normas técnicas UNI 11402 e ISO 22222, los profesionales disponen de las herramientas adecuadas para explicar y guiar a sus clientes al elaborar planes financieros adaptados a sus necesidades.
La educación financiera personal y la asesoría financiera
Un educador y planificador financiero personal no comercializa productos específicos. Su trabajo es asegurarse de que el cliente entiende sus necesidades económicas y las distintas alternativas de que dispone antes de recurrir a un asesor financiero. Los asesores financieros trabajan a menudo con clientes de distintos perfiles patrimoniales dentro de entidades bancarias o firmas de inversión, y su objetivo es recomendar productos financieros alineados con el perfil de objetivos, riesgo y horizonte temporal del cliente.
Estas dos figuras se diferencian sobre todo en el enfoque: el educador financiero personal está del lado de la demanda y ayuda al usuario a estructurar sus finanzas personales y a tomar decisiones estratégicas sin conflictos de interés. Por su parte, el asesor financiero trabaja desde la oferta: propone soluciones y productos financieros específicos dentro del mercado. Estas dos funciones son complementarias. Un cliente bien informado tomará decisiones acertadas con mayor probabilidad, y sacará más partido a los servicios de asesoramiento financiero.
El rol de la mediación de seguros
De igual modo, la mediación de seguros es muy relevante para proteger (también financieramente) a los individuos y familias. Un educador y planificador financiero personal analiza las necesidades reales de cobertura en áreas como salud, vida, invalidez o jubilación, pero es el mediador de seguros quien busca y presenta las mejores opciones disponibles en el mercado asegurador.
La colaboración entre ambos roles garantiza que los clientes encuentren soluciones adecuadas para su situación económica y financiera. Un educador financiero personal aporta un análisis de los riesgos y la capacidad de pago del cliente. Con esa información se elegirán seguros que realmente cubran las necesidades concretas del cliente y no los que una parte interesada pueda querer comercializar. El mediador de seguros, por su parte, pone a disposición del cliente los productos que se ajustan a sus requisitos.
La combinación de educación y planificación financiera personal, asesoría financiera y mediación de seguros permite que las personas puedan tomar decisiones financieras sólidas y bien fundamentadas, y mejora su estabilidad a largo plazo.
Los profesionales que obtienen la certificación de Educador y Planificador Financiero Personal han recibido una formación especializada y ayudan a que las familias gestionen sus finanzas de manera estructurada y siempre con el bienestar de estas familias como única meta. Su trabajo contribuye a mejorar la educación y autonomía financiera de los ciudadanos, pero también fortalece la colaboración con asesores financieros y mediadores de seguros. La colaboración de estas tres funciones crea un ecosistema donde las necesidades del cliente son la prioridad.
Por otra parte, la certificación de Educador y Planificador Financiero Personal es valiosa para quienes quieren trabajar como educadores financieros independientes, pero también es una herramienta imprescindible para los asesores financieros y mediadores de seguros que desean complementar sus conocimientos y mejorar el servicio que ofrecen a sus clientes.
Foto de Jakub Żerdzicki en Unsplash