¡Este libro está dirigido a ti, que eres papá o mamá!
¿Sabías que los niños no reciben ningún tipo de educación financiera ni en la escuela primaria, ni en el bachillerato y casi nunca en la universidad?
Sin embargo, ellos están en contacto con el dinero desde que son muy pequeños y es por eso que tenemos el deber, como padres, de ayudarlos y enseñarles a manejarse en las finanzas lo antes posible de la misma forma que los educamos en sus hábitos de higiene y alimenticios o les transmitimos una educación sexual saludable.
Si tu hijo ya sabe contar o pedir que le compres algo, ya puedes empezar a enseñarle qué hacer con el dinero. Si, por el contrario, está casi listo para ir a la universidad, aún estás a tiempo de lograr que se vaya preparado para esa gran aventura.
El libro contiene poderosas y comprobadas herramientas, fáciles de usar, enfocadas en la educación de los niños; pero tiene también muchas ideas que te pueden servir a ti personalmente, como adulto. Por ello, cuando lo estés leyendo, piensa en cómo vas a ayudar a tus hijos, pero también en como puedes aplicar dichas ideas en tu propia vida.
Saber que educas a tu hijo para tener inteligencia financiera no tiene precio. Te sorprenderá lo sencillo que puede ser.